Motilidad
La motilidad de los ojos sirve para seguir y fijar el objeto de interés. Hay tres movimientos básicos: las fijaciones (para que no se saturen los fotorreceptores de la retina y desaparezca la imagen hay un movimiento del ojo imperceptible e involuntario), los sacádicos (son movimientos muy rápidos para fijar en un instante lo que nos interesa) y los seguimientos (movimientos más lentos que persiguen el objetivo).
La sintomatología típica es: movimientos de la cabeza excesivos, pérdidas en la lectura frecuentes, saltan líneas o palabras, velocidad lectora lenta, comprensión baja y dificultades en la atención. En general, hay dificultades con la lectura. Las personas que tienen problemas de aprendizaje suelen tener también problemas de motilidad.
El tratamiento es con terapia visual.